Adaptar la mezcla de pintura a las condiciones de temperatura, humedad y tamaño de reparación, eligiendo el catalizador y diluyente adecuados, es clave para conseguir un acabado óptimo. Catalizadores lentos en verano, rápidos en invierno y un control de la temperatura de trabajo son algunos de los factores clave.
Claves para la elección del catalizador y diluyente adecuados en la pintura automotriz
La elección del catalizador y diluyente adecuados es fundamental para obtener un buen resultado en la reparación de chapa y pintura, especialmente cuando se trabaja en condiciones de altas temperaturas y baja humedad. Algunos factores clave a tener en cuenta:
Temperatura
La temperatura es el factor más importante a la hora de elegir el catalizador. En general:
Con temperaturas entre 20-25°C se pueden utilizar catalizadores estándar o medios
Con temperaturas bajas se usan catalizadores de secado rápido para acelerar la reacción
Con temperaturas altas (por encima de 30°C) se eligen catalizadores lentos para evitar un secado demasiado rápido en superficie
Es clave para controlar la temperatura del producto, la superficie a pintar y el ambiente de trabajo.. Aplicar con temperaturas muy altas puede causar defectos como velocidad o bajada de brillo por un secado superficial demasiado rápido..
Humedad
La humedad relativa también influye en la elección del catalizador. Lo ideal es trabajar con una humedad entre 55-65%..
En ambientes secos, la pintura base agua se secará más rápido, dificultando la integración de las capas
Tamaño de la reparación
El tamaño de la superficie a pintar también condiciona la elección:
En reparaciones grandes, con temperaturas altas, se usan catalizadores lentos para mantener abierta la película
En reparaciones pequeñas a baja temperatura, catalizadores rápidos acortan tiempos de secado
Porque en verano, con las altas temperaturas, el barniz se vela o hay bajada de brillo cuando lo sacas de la cabina.
En verano, con las altas temperaturas, el barniz puede presentar problemas de velocidad o bajada de brillo al sacarlo de la cabina de pintura por varias razones:
Temperatura de aplicación muy alta
Si la temperatura del barniz y la superficie a pintar es demasiado alta en el momento de la aplicación (por encima de 25-30°C), puede provocar un secado demasiado rápido del barniz en la superficie, atrapando disolventes en el interior.. Esto genera defectos como velo, opacidad o bajada de brillo.
Humedad relativa muy baja
Barnizar con una humedad relativamente muy baja (por debajo del 50%) también favorece un secado demasiado rápido en superficie, con los mismos problemas de atrapamiento de disolventes.. En verano, con aire seco, es fácil que se den estas condiciones.
Mala evaporación de disolventes
Si los disolventes del barniz no tienen tiempo suficiente para evaporarse adecuadamente antes del secado, quedarán atrapados en el interior de la película.. Esto ocurre si se aplica demasiado espesor de barniz o si no se deja suficiente tiempo de evaporación entre las manos.
Mala elección del barniz
Algunos barnices no están formulados para soportar altas temperaturas y baja humedad.. Es importante elegir un barniz específico para condiciones de verano o con aditivos que mejoren su resistencia a estas condiciones.